jueves, 6 de noviembre de 2008

Acuérdate loco 1 (manuscrito del Cholo Cepeda)

Acuérdate loco de Cucho Serrano: Peleador callejero, arquero de “Platense”, el equipo del Rodillo, con su presidente El Presi De la Torre; los partidos a muerte contra “El King”, presidido por el Licenciado Martillo, en la Liga Juan Díaz Salem, con el organizador y dueño, el maricón Salas, que murió apuñalado por su mariconada. Acuérdate de la música de la Liga, era sólo la de Daniel Santos y todo ese gremio. Los equipos participantes eran “Picapiedras”, “Nacional”, “Cuba Junior”, etc. Acuérdate de la pelea de Cucho, arquero de “Platense” y Caballón, arquero del “King”. Eso era a muerte. En el King jugó “Cacho” Bardales. En “Platense” jugaban Borrego, Tranqui y el negro Mina.

Seguimos ahora según el orden de los callejones:

Primero, el flaco Quiróz Buona Sera: Era muy guapo (tiraba a meco);
Jorge Rocafuerte, (el negro Ojito), enamorado de por vida de Haydeé Cárcamo;
El maricón Ángel Godoy, que le gritaba a todo el mundo “Cachero Vergaguada”;
La Pava Pavoni, nuestro entrenador. Acuérdate cuando Manuelón lo llevó de representante al colegio y Pavoni le dio dos cocachos delante de todos los compañeros;
La Cucufata, aparentemente murió de Sida;
Los Puente con su billar;
La tienda de Don Emiro, donde comprábamos la de Cristal para la chupa;
La Bandita, conformada por esas uñas cancerígenas, esos uñeros que mataron al taxista en la Plazoleta porque no quisieron pagar la carrera. Uno de ellos le rayó la espalda a Galleta y le cogieron cien puntos;
El Diablo, Bello, murió abaleado siendo guardia de Seguridad;

acuérdate que de pelado el difunto nos miraba y nos decía “mírame bien, mírame bien chetumadre, mírame bien” y nosotros nos cagábamos de la risa porque de verdad el man era bien feo;
El gordo Mañuco, sus peleas de toda la vida con el sambo Babita. Memo le rompió una botella en la cara por portarse mal en una fiesta donde el Chugo;
El viejo Ángel, Toro Loco, Arroz con chepa, el maricón Coki, la negrita, la Señora María, Fulton (el del arroz con menestra en la Avenida Comín);
El inolvidable pollo asado de Don Ramón y el “aguado”;
Jorge Avilés, alias “Barreto” o “Juma India”. Siempre que había una fiesta donde el Chugo tú decías que peleaba a las cinco de la mañana y así era, a veces con los mismos hermanos;
El loco Mickey;
El Sida Tobita y Panchito;
Chabaco y Miguel: Papá Noel los salía a buscar en la madrugada, con pijama, y los manes se le escondían;
El loco Palma, que le partió la cara a Kukuku con una botella y nunca se supo porqué;
Niño Tarro de Petróleo: Fumón pero muy educado;
Chazán, que vendía helados. Él y la esposa ya murieron;
El man de la esquina, compañero nuestro de la escuela, se hizo traficante de heroína. Cayó preso cinco años. La negra vaciló con él y lo iba a visitar a la Penitenciaría;
Pajuelo, primo de los Santa Cruz, ya murió;
Figurita, murió de cáncer por los químicos, jugador de naipes con Don Veta;

Eliseo, alias el Pavo: Quería jugar volley en el barrio, pero en pepas. Le decía mijo a Luchín, y nos gritaba cuando estábamos en el garage de su casa “aclaren hijueputas, aclaren”. Y le decía al Licenciado (el mismo hijo del man) cuando se le llevaba el carro: “te haces humo hijueputa”. Una vez lo siguió a machete al Chugo. Por la mañana se le robaban el pan los que se habían amanecido chupando y se lo comían con ron y coca cola. Allí también vivía Panchito, inventor del Tumba Sabido (puro con mamey) y del Ron Panchito;

La mamá de Manuelón, la señora Meche, de Los Almendros: Chupas a los quince años, con fío y chismes en bomba;
Don Eliú Pombo: Te regalaba a la hija que tú querías;
Los Solano: Típicos serranos que iban juntos a todos lados;
Glauco Cordero (Mirada de Longo);
Los zapatos Black and White y la camisa de amor y farra de Joselo (Cucaracha de agua);
Pinina: Le debía dar a Monín y a Manuelón la semana porque sino le dirían a Pluca que se le quería comer a la ñaña;
Tarzán Tomalá: Le decían así porque fumaba en los árboles;
El loco Vicente Torres murió;
La Banda de Careplato: Gualberto, los Torres. Siempre maltrataban a los más cojudos, entre esos yo.

Acuérdate loco de los árboles de Navidad que hacían los barrios de la Ciudadela y los inscribían en los concursos de El Universo;
El Petiso Perico, implicado en el tráfico de Agua Loca con los Hermanos Buchannan’s (Coco y Gerardo), como lo grabamos esa noche con voz de los Intocables;
José Cecilio Sellán, alias Muñeco de Brea;
El Uruguayo violador, Reloj Suizo;
Rucucú Servacuaco, simpre con las medias cambiadas;
El papá de Angel, que murió;
El colorado Barahona, que sólo escuchaba música de aniñados, en inglés; decía que en español era para cholos.

Acuérdate de cierta vez que Cachato escuchaba música a todo volumen y salió Chicho, el hermano. Cansado, sacó el equipo, lo puso bajo las llantas traseras del camión, lo prendió y se las pasó por encima;
El viejo Pombar cuando tiró el equipo de música a media calle y dijo: Very good;
El equipo Baratito, de Kalule;
El loco Mente Enferma, que puso en los señaleros de la calle de su casa: “Calle Las Loras”;
El Cholo Cepeda (yo mismo), que cuando estaba pluto buscaba a un grandote para hacerle problemas y que me arrastrara a puñetes;
Galleta, que veía por las madrugadas, frente a su casa, que pasaba una carreta tirada por caballos negros. Es verdad que unos choros pasaban en una carreta robándose las tapas de las alcantarillas, que eran de hierro, para venderlas al peso;
Cuando se llevaron en rodillo de cemento de la zona llamada El Rodillo. Se lo llevaron al barrio Cuba y luego lo recuperaron;
La pelea en el cine Inca entre Karate y el Pato Arias;
Los partidos de Ciudadela en el Capwell;
Roberto Villacís, que le prestó unos mocasines a Bardales para que vaya con Barcelona, a jugar el primer partido, y nunca se los devolvió, y todavía, cuando lo ve, le dice que se los devuelva;
Las peleas del patucho Gálvez con Popeye eran venenas;
Los cabezasos del viejo Pombar;

El Chugo, Cocojox, Lechuga y el Bozo cogieron a un meco en la calle y lo metieron a la casa del Chugo y le robaron las tarjetas de crédito. Por la mañana, se fueron a desayunar a un hotel aniñado. El que frenteaba era Lechuga. Le trajeron la factura y al firmar se dieron cuenta de que no era la misma firma. Los dueños bravearon pero, hasta eso, el Chugo fue a prender un carro que se le habían traído a un man que se había quedado dormido. Se embarcaron y se dieron a la fuga. Estaban ultra plutos y se estrellaron justo frente al manicomio Lorenzo Ponce. Luego lo dejaron botado y se dieron a la fuga otra vez;

A Nicota lo fajó el Chavo Roca. El papá le pagaba, supuestamente, los días de trabajo, y Nicota se ponía una venda en la cabeza metiendo paro de que estaba herido, y con el dinero que pedía para las medicinas se engrifaba;
Recuerda loco cuando al gordo Iturralde le ibas a partir la cabeza con la armónica en una fiesta en la casa de Billy Ladd;

El Chugo, cuando ya no tenía plata para seguir chupando, en la madrugada sacaba al portal de la casa la grabadora para venderla, o los zapatos del que se había quedado dormido, lo que sea, con tal de seguir bebiendo. Siempre lograba vender algo. Cuando ya no tenían plata para fumar en la casa del Chugo, el Bozo comenzaba a buscar tamugas detrás de los cuadros de los santos porque el man decía que eran sus escondites benditos. Ahí vivía Toñito, que tenía un cajón con llave, con sus cosas personales. Un día se lo abrieron y le robaron todo y todo se lo fumaron;
Acuérdate loco cuando Gorilón fue a reclamar donde Don Ángel un anillo que le había empeñado y éste le sacó un cofre donde tenía todo lo empeñado para que tomara el suyo, pero Gorilón escogió el más grande, que no era de él, y se lo llevó. Acuérdate loco.